Tartufo

Tartufeta

(Una versión libre de Tartufo, contra la política neoliberal y berreta.)















“La sangre tiene razones
que hacen engordar las venas.
Pena sobre pena y pena
hacen que uno pegue el grito.
La arena es un puñadito
pero hay montañas de arena”
El payador perseguido. Atahualpa Yupanqui.

Ficha técnica:
Versión: Diego E. Rodríguez
Composición musical: Eliana Wainer
Elenco: Magdalena Casas, Gabriel Galíndez, Enrique González, Germán Ivancic, Osvaldo Malizia, Raúl Moreschi, Diego E. Rodríguez, Laura Silberberg, Andrea Vertone, Eliana Wainer.
Música en vivo: Martín Palacios, Eliana Wainer
Dirección: Diego E. Rodríguez
Dirección adjunta: Germán Ivancic
Diseño y realización de vestuario: Crihstina Amaro Barszczuk, María Lourdes Cettour, Florencia Feijóo y  Martina Petersen
Diseño escenográfico: Osvaldo Malizia y Diego E. Rodríguez
Realizacion escenografica y objetos: Enrique González
Diseño de iluminación:Rodrigo González Alvarado
Asistente de dirección:Esteban Cabrera
Asistencia de producción: Melina Rodríguez
Asesoramiento corporal: Germán Ivancic y Magdalena Casas
Diseño gráfico de flyer:Enrique González
Comunicación: Noelia Pirsic.
Gestión y producción ejecutiva: Barbados, artes escénicas.

Sinopsis:
Orgona ha dado asilo en su casa a Tartufeta, un supuesto abnegado y devoto de Dios que prejuzga y estigmatiza las conductas de todos los otros con la excusa de cultivar una moral religiosa implacable; consiguiendo de esta forma gobernar la casa ajena y más. Orgona enceguecida reniega de sus hijos, familiares y posesiones, en defensa de este cruzado de la fe.

Notas para la versión:
Tartufeta nace como reacción artística al impacto producido por el primer triunfo neoliberal en las urnas de la República Argentina. Al golpe de estado neoliberal de Brasil y Paraguay; y a la dictadura neoliberal de Honduras, entre todas las calamidades que el neoliberalismo produce cotidianamente en su ambición destructiva y destructora del planeta.
Tartufo de Moliere, vino a mi memoria como espejo que da cuenta de la trampa de la que fuimos, y somos víctimas:  la “moral” como estandarte de los depredadores.
La versión, gauchesca y musical, nace para contextualizar, sin mediaciones, esta tragicomedia universal con nuestra realidad nacional. Lo producido surge como efecto de otra mirada, una más distanciada del motivo inicial, lo que permitió intuir responsabilidades y anudamientos entre los diferentes actores políticos, que también hicieron posible el advenimiento de la nueva peste de Tebas.
Diego E. Rodríguez.